Cuando piensas en lo rápido que pasan las cosas probablemente la mitad de lo que recuerdas serán
dos o tres segundos de todo lo que pasó. Por ejemplo un día cualquiera del año,
un día de verano. El verano dura unos cien días. De éstos, quizá, algo que te
sorprenda o emocione. Y esto no es solo rebuscado, sino que también tiene un
significado. Una fecha, una canción, un acontecimiento, un rostro, una persona,
su nombre. Una palabra, un lugar...Un momento. Todo tiene su razón, su sentido,
algo escondido. Algo que algún día nos haga comprender por qué pasó, por qué
tuvo que ocurrir. Por qué lo recordamos siempre, por qué nos marcó de esa
manera. Una vez leí que; cada cosa, cada detalle tiene un por qué, una razón.
Oculta o no, la tiene.
Dicen que el 10% de tu memoria, formó parte de tu
infancia. Lo que más impacta, extraña. .
En una vida monótona, no hay novedades, casi nada nuevo.
Una boda, un nacimiento, una muerte. Un mundial en el que tu selección gane eso
es nuevo.
No sé, tantas cosas que pasan y algunas nos hagan llorar.
Una despedida. Un viaje de ida y sin vuelta. Un carácter. Una voz. Un rostro.
Una emoción. Que con el tiempo vas olvidando.
Tantas cosas que nos gustaría tener, tocar, disfrutar y no se puede.
Como puede suceder al revés tienes todo para conseguirlo pero no las quieres.
Algunas veces solo buscamos emociones o
sentimientos escondidos en alguna parte. Buscamos un lugar a cual ir, una hora,
alguien que te acompañe, un tipo de ropa.
Querer no aburrirte y hacer lo que sea…
No hay comentarios:
Publicar un comentario